NUESTROS SERVICIOS
Formación sobre los efectos visuales y no visuales o biológicos de la luz.
Consultoría sobre cómo diseñar y usar la luz y las vistas en el interior para mejorar la salud, el bienestar y la eficiencia de las personas.
Diseño de proyectos integradores del edificio; luz, calidad del aire y temperatura, ruido, circulación y actividad física, salud y bienestar, color, materiales, biofilia, eficiencia energética.
Consultoría sobre cómo elegir y aplicar los nuevos sistemas de certificación de edificios dirigidos a mejorar la salud de las personas (Certificado Well, Certificado Fitwel).
Asesoría para potenciar la estrategia ESG (Environmental, Social and Governance) de las empresas, dando más importancia a las personas.
“Lo que más nos motiva es mejorar la salud y el bienestar de las personas en el interior de los edificios”.
Alinear los
intereses
Lo que más nos motiva en Open The Box es mejorar la salud y el bienestar de las personas en el interior de los edificios, donde la luz juega un papel fundamental ya que tiene en nosotros efectos visuales, biológicos, físicos y emocionales.
Colaboramos con múltiples organizaciones para influir y difundir los cambios que se están produciendo en el mundo del diseño y el uso de los edificios para que sean saludables, donde las necesidades y preferencias de las personas está en el centro de todos los esfuerzos.
Los entornos construidos causan muchas reacciones en nuestro cuerpo, desde procesos químicos hasta respuestas físicas y emocionales, tanto conscientes como inconscientes. El objetivo debería ser disponer de edificios saludables y sostenibles, en este orden. De manera que ayuden a las personas a mejorar su salud y su bienestar, a la vez que protegen el medio ambiente, haciendo que las inversiones sean mucho más rentables. Por lo que ganan los individuos, la sociedad, el medio ambiente y la economía.
Además de buscar soluciones para resolver los problemas inherentes a los edificios “enfermos”, también sabemos que hay muchos edificios que no tienen ese apelativo, pero que perjudican a las personas que trabajan y/o viven en su interior. En la práctica esto supone que casi todos los edificios pueden ser mejorados. Y con Open The Box pueden afrontar estas mejoras con un plan desarrollado en fases, con objetivos claros y resultados medibles.
Estas mejoras son perceptibles y pueden cuantificarse. Sirva como ejemplo la encuesta de satisfacción realizada en el edificio de la nueva sede de NAB en Melbourne. Midiendo indicadores sencillos se ha verificado un aumento del 17% en la satisfacción del personal, relacionándolo además con un aumento del 11% en su productividad.
Tenemos que seguir dando pasos adelante basándonos en las evidencias científicas y en la experiencia. En Open the Box, apostamos por reflexiones como esta, que recogemos de Reset and reload: “Innovación, diferenciación, cordura y valentía para abandonar esquemas obsoletos y diseñar estrategias capaces de abrir nuevos mercados son las características que definen a las empresas que mejor están resistiendo la situación actual. Antes de que sea demasiado tarde, el proceso pasa por cuestionar la lógica antigua todavía dominante y pasar a la acción”.
La adopción del concepto “diseño centrado en las personas” está siendo aplicado en edificios cuyos gestores innovadores quieren diferenciarse de la competencia. Rehabilitar un edificio para que sea saludable y sostenible es una inversión atractiva y rentable, pero recibe mucha menos atención e inversión de lo que merece.
Esto se debe en parte a que solo se tiene en cuenta el ahorro energético en el cálculo de la amortización.
Se debería considerar también otras mejoras importantes como, la dimensión del edificio y las inversiones que ayudan a las personas a mejorar su salud, bienestar y rendimiento.
Agregar todos los beneficios puede reducir drásticamente el tiempo de amortización de la inversión a la vez que incrementa significativamente el valor del edificio.
Y también se debe en parte a la dificultad para cuantificar todos los beneficios (que justifiquen la inversión necesaria) y hacerlo de una forma adecuada para que puedan ser aprobados por los órganos pertinentes de la empresa y, en su caso, por la entidad financiera.
No hay, ni habrá en el futuro, mucha obra nueva. Los proyectos de rehabilitación serán parte fundamental del mercado inmobiliario, como ya se está empezando a constatar.
Desde el punto de vista de la decisión, las rehabilitaciones profundas son más fáciles de plantear cuando las instalaciones están al final de su vida útil, ya que de cualquier manera es necesario actualizarlas y el diferencial de inversión se amortiza en pocos meses.
• Retorno de la inversión en euros
• Retorno de la inversión en calidad de vida y eficacia de los usuarios
Cuando se incluyen en los cálculos todos los beneficios, estas inversiones pueden competir con cualquier otra del negocio, reduciendo además los riesgos de la compañía.
Hacer un análisis completo llevará a una mayor inversión de tiempo y recursos, pero muy probablemente el resultado de la decisión sea distinto y merezca la pena realizar el ejercicio.
“No comprender nuestra evolución nos ha llevado a decisiones erróneas para nosotros y la economía».
Es por esto que en Open The Box ofrecemos nuestros servicios a los distintos actores del mercado inmobiliario, para ayudarles a transformar los conceptos antiguos de diseño, construcción y uso de edificios que tanto limitan o incluso perjudican la salud y bienestar de las personas, por los nuevos, en los que las personas con sus necesidades y preferencias se ponen en el centro de todos los esfuerzos, con el objetivo de tener edificios mucho más saludables y rentables.
En un mundo ideal los objetivos de ocupantes e inversores deberían estar perfectamente alineados, pero la realidad es que hoy no es así por múltiples razones.
Los inversores se preocupan de aspectos como el retorno de la inversión de su propiedad inmobiliaria, de las ratios de ocupación y de su estabilidad, de la duración de los contratos o del incremento del valor de las propiedades.
Los ocupantes se preocupan de que los espacios cumplan con sus necesidades y expectativas para que les hagan sentir bien y puedan desarrollar mejor su vida y actividad.
En el caso que los propietarios ocupen los espacios con sus propios empleados se preocupan por la reducción del absentismo, la mejora del reclutamiento y retención de empleados, la reducción de la necesidad de espacios, y el incremento de su bienestar y capacidades.
Hacemos una mención específica a los edificios ocupados por la Administración, ya que casi siempre ofrecen servicios para atender a la ciudadanía por lo que se desarrolla en ellos una función eminentemente social. En este sentido, son especialmente sensibles los dedicados a los cuidados de la salud tanto en hospitales como en las residencias para mayores, o en la formación de los niños y jóvenes en colegios y universidades.
La administración se preocupa por dar servicio confiable a la ciudadanía.
En todos los casos se podría incrementar significativamente el beneficio para la sociedad aplicando soluciones conocidas e innovadoras.
A continuación, quiero mencionar algunos casos en los que quedan reflejados los beneficios de hacer bien las cosas y mejorar el valor de las inversiones:
• Incremento del bienestar y la eficiencia de los empleados. Como queda reflejado en el estudio de la universidad de Harvard, se puede mejorar en un 26,4% la capacidad cognitiva; en un 6,4% la calidad del sueño; o en 30% la reducción de sintomatologías si comparamos un edificio convencional con uno moderno y eficaz.
• Reducción de necesidades de espacio: en el análisis de la información proporcionada por los sistemas de control, se pueden tomar decisiones que ayuden a reducir las necesidades del espacio en un edificio de oficinas en un 30%. También pueden aumentar el espacio ocupado de un edificio a través de la reducción del tamaño de los equipos como el del aire acondicionado.
• Según John Spengler, PhD, Environmental Health & Human Habitation Professor de la Universidad de Harvard, el coste de tener aire de calidad en el interior de un edificio es de 40 US$ por año y por persona, y su retorno en términos de mejora de las capacidades cognitivas es de 6.000 US$ por persona y por año. Si nos centramos solo en el coste de las instalaciones, se produce una “falsa economía” ya que las repercusiones de estas decisiones van mucho más allá de estos costes de adquisición, afectando a los usuarios en su salud, bienestar y eficacia.
• Incremento de ingresos por acuerdos con inquilinos. Los beneficios obtenidos por los inquilinos aplicando las nuevas soluciones en los edificios, se están introduciendo selectivamente o en conjunto para negociar unas nuevas condiciones del contrato de alquiler.
• Mayor índice de ocupación. A todos nos gusta trabajar en un entorno agradable y adaptado a nuestras necesidades personales. Por lo que se incrementa la posibilidad de encontrar un inquilino que quiera usar nuestras instalaciones.
• Incremento del valor de venta. La suma de los dos puntos anteriores y describir las características específicas del edificio relacionadas con el bienestar de las personas es, hoy en día, un argumento que incrementa el valor del activo, pudiendo incrementarse según operaciones realizadas en el mercado entre el 7 y el 25%.
Todo lo anterior nos lleva a reducir la tasa de riesgo del edificio. Los propietarios e inversores innovadores alinearán sus objetivos con los de los ocupantes para mejorar tanto la salud y el bienestar de las personas como el rendimiento de las inversiones.
Mejorar
la estrategia
Mejorar la estrategia ESG (medio ambiente, social y gobernanza) para las empresas. Los criterios ESG están polarizando el mercado de la contratación de oficinas. Y lo hará también en el resto de mercados inmobiliarios porque la sociedad, cada vez más, demanda conocer qué es lo que hace una empresa para proteger los preceptos ESG.
La mayoría de las empresas se están centrando en la E y la G que corresponde con el Medio ambiente y la gobernanza. Pero el mayor valor se encuentra en la S que corresponde con lo social, en definitiva, con las personas.
De hecho, la E y la G han acaparado el esfuerzo de las empresas desde hace años y ya se está empezando a notar la diferencia que marcan las empresas innovadoras en estos dos aspectos. Las enseñanzas recibidas en el desarrollo de estos puntos nos servirán para acelerar el proceso y encontrar el máximo valor de la estrategia ESG y cerrar el círculo con el desarrollo de la S.
En Open The Box acompañamos a las empresas en la adopción de sus estrategias ESG para atender las demandas de la sociedad y también para incrementar su repercusión y valor. La idea no es hacer un gran esfuerzo para cumplir con el ESG, si no que los aspectos sociales, medioambientales y la gobernanza formen parte fundamental de la estrategia de la empresa.
De este modo, superaremos las siglas y convertiremos la estrategia en un auténtico valor añadido de la organización que la asuma, para diferenciarse y mejorar su cuenta de resultados.
Asesoramiento
en certificación
Asesoramiento en la certificación de edificios Well y Fitwel. Estos nuevos certificados se centran en evaluar la calidad del entorno construido desde el punto de vista del usuario. Así priorizan la salud, la seguridad y el bienestar para maximizar el valor del capital humano y social a la vez que el de la propiedad y el negocio.
En su forma más simple, el bienestar puede definirse como aquellas condiciones que permiten a las personas estar saludables y sentirse bien con la vida.
Nuestra salud física y bienestar mental es un sistema complejo conectado e interdependiente, y que está afectado por nuestros genes, por nuestra vida social y por las circunstancias económicas, así como por la calidad de nuestras relaciones y el valor y el propósito de nuestro trabajo. Nuestro bienestar también se ve afectado por el medio ambiente, tanto en interiores como en exteriores, y por nuestra conexión con la naturaleza.
El bienestar en la oficina está determinado por el puesto de trabajo, su calidad ambiental, la cultura que promueve y la experiencia que ofrece, la ubicación de la oficina, el contexto comunitario, contribuyendo o restando valor al bienestar de los ocupantes.
La Organización Mundial de la Salud indica que “La salud es un estado de completo bienestar físico, mental y social, y no simplemente la ausencia de enfermedad o dolencia”.
El bienestar importa:
Al individuo.
A todas las personas a las que preguntes les interesa el bienestar.
A la sociedad.
La sociedad invierte cantidades ingentes en solventar la no salud, ahora toca invertir en salud y bienestar.
A los propietarios.
Cada vez son más conscientes de que el activo más importante en el interior de los edificios son las personas.
A los diseñadores y contratistas.
Así pueden atender a las demandas del mercado, mejorando su reputación.
A los ocupantes de los edificios.
La productividad, el absentismo y querer permanecer en el empleo están afectados por el bienestar percibido por los empleados.
Los edificios donde vivimos y trabajamos afectan a nuestra salud, bienestar, habilidad de trabajar, creatividad y capacidad social.
Partiendo de que los nuevos edificios, por ley, tienen que ser sostenibles, existe una gran oportunidad para hacerlos teniendo en cuenta las necesidades de las personas.
Existen nuevos sistemas de certificación que evalúan el bienestar de las personas dentro de los edificios como WELL o FITWEL.
Lo más importante para los inversores inmobiliarios es:
1
Atender a las demandas de
los clientes y/o usuarios.
2
Incrementar el valor de nuestras
inversiones y mitigar los riesgos.
3
Mejorar la
imagen de marca.
4
Aportar a la transformación
del mercado.
5
Preparar los edificios para que nos
ayuden a desarrollar nuestro futuro.
6
Mejorar los sistemas de gestión
y mantenimiento.
7
Conocer las situaciones críticas,
incluso antes de que se produzcan*.
8
Elegir bien que datos usamos
para que sean una ayuda en lugar de una carga.
* Aportar mejor información a los responsables involucrados. Además de quienes gestionan el edificio y su mantenimiento, hemos de tener en cuenta: los propietarios, los responsables de marketing de la empresa para dar una mejor imagen de la firma, ya que mejoran los servicios ofrecidos y, por supuesto, a los usuarios de los edificios alquilados para que sean conscientes de las ventajas que disfrutan.
La tendencia global nos muestra que cada vez se está dando más importancia en las inversiones inmobiliarias a las estrategias dirigidas a beneficiar a los ocupantes como herramienta de negocio en lugar de que sea la reducción del coste el principal objetivo.
El primer desafío que afrontan las empresas es encontrar personas con talento, atraerlas y mantenerlas, por lo que es muy importante localizar las oficinas en el lugar adecuado y crear un entorno agradable buscando la excelencia en la operativa y la innovación.
En el clima económico y laboral actual se busca la optimización, por lo que las empresas ya no piensan en los edificios como en una caja, sino como un factor de diferenciación.
Después de todo, al diseño centrado en las personas solo se le está dando la importancia que merece, porque el coste asociado a sus salarios es mayor que el resto de los costes de un edificio.
El segundo desafío es ofrecer un lugar y unas formas de trabajo innovadoras que optimicen la capacidad de las personas y el uso del espacio.
Se incrementa notablemente la capacidad de innovación cuando el entorno invita a trabajar en equipo tanto con miembros de los distintos departamentos de la empresa como con personas del exterior.
Durante los próximos años se incrementará el uso de espacios flexibles donde trabajarán en equipo empleados de la compañía con proveedores y clientes, con técnicas de innovación abierta, siendo la conectividad un vínculo primordial que afectará a la experiencia de las personas, de forma que la estructura del espacio en las oficinas y los tipos de tecnologías utilizadas ayudarán a hacer mejores negocios.
Una vez que nuestros diseños y edificios cumplen con la estrategia de proporcionar un espacio saludable a las personas, el paso siguiente natural, puede ser el de certificar el edificio para que el mercado inmobiliario y los ocupantes sepan las ventajas de nuestros edificios.
Esta debe de ser la secuencia, y no como hacen muchos inversores que se plantean ¿Qué tengo que cambiar en mi edificio para obtener el certificado correspondiente?
Este proceso es mucho más caro al modificar los planes iniciales. Ya que incurrimos en retrasos e incremento de los presupuestos y al final siempre será solo un parche.
Método
de diseño
Nuestro método de diseño cooperativo e integrador está compuesto por las siguientes fases:
Fase de Aproach
Inicio de la colaboración dando formación sobre la evolución del ser humano y lo que implica en nuestras necesidades y preferencias.
Se abordan también las grandes deficiencias de los edificios que ocupamos. Se definen las áreas de actuación.
Fase de Briefing
Recopilamos información sobre la estrategia y actuaciones de la empresa, sobre su plan actual del uso y/o comercialización de edificios. Vislumbramos conjuntamente como podría ser la nueva estrategia y las ventajas competitivas que puede aportar.
Fase de definición y presupuesto del proyecto
Definición de áreas de actuación. Establecimiento de objetivos. Oferta de colaboración.
Fase de desarrollo
Para que un edificio saludable y sostenible sea mucho más rentable, utilizamos las
sistemáticas de proyectos colaborativos e integradores.
En el diseño colaborativo es fundamental que un líder con visión establezca los objetivos con la necesaria racionalidad y claridad del negocio que se desarrollará en su interior, para orientar y motivar al equipo formado por individuos de gran valía, conocimientos y experiencia.
Todos tienen visión global del proyecto y no, como es habitual, sólo en fases aisladas.
El equipo puede estar formado por el gerente del proyecto, el equipo de diseño (arquitectos e ingenieros), los proveedores de las distintas tecnologías (cerramientos, eléctricas, mecánicas, civiles…) los constructores e instaladores (configuración de los equipos), los responsables del mantenimiento y los usuarios.
El diseño integrador revela y explota las conexiones entre las partes de los distintos sistemas para lograr mucho más que la suma de sus partes. El diseño integrador suele aportarnos soluciones constructivas que cuestan menos y rinden más, casi nada es arbitrario ni se deja al azar.
Durante el proyecto además de resolver las partes estéticas y funcionales, hay que incluir cómo usar mejor el edificio.
Fase inicial del proyecto
Empezamos la transformación con los trabajos previos:
• Transmito al equipo los conceptos fundamentales completando la formación.
• Con los responsables asignados, analizamos en detalle la estrategia, los objetivos y las soluciones actuales de la empresa en relación con el diseño y uso de los edificios.
• Definimos el camino hacia la transformación sostenible y saludable de forma que sea comprensible para todos.
Fase de implantación
Iniciamos el proceso de transformación, con nuevas estrategias y objetivos basándonos en la ciencia. Normalmente incluye la realización prototipos para pruebas de rendimiento.
Validación del trabajo realizado e integración en proyectos corporativos.
Colaboradores
Paula Gómez-Vela
Arquitecta y Doctora en Biomedicina PhD. Investigadora y Diseñadora especialista en creación de Healing Environments (Arquitectura para la Salud) aplicando: Naturaleza, Luz, Color y Silencio para la salud.
Formación
Arquitecta Superior por la Universidad Politécnica de Madrid (2000). Becada por Urban Design Oxford Brookes University (UK) (1997-1998). Master en Medioambiente y Arquitectura Bioclimática, MAYAB de la Universidad Politécnica de Madrid (2018).
Doctora en Biomedicina PhD. Sobresaliente Cum Laude (2022). Investigadora y diseñadora especialista en Healing Environments (arquitectura para la salud). Su tesis en Biomedicina (Sobresaliente Cum Laude) ha estudiado el efecto biológico del entorno cromático en pacientes oncológicos en unidades de tratamiento en Hospitales de día, con el objetivo de encontrar el mejor entorno físico, para ayudar al bienestar de los pacientes durante su estancia en el hospital y en sus resultados de salud, siguiendo el método científico. Publicación en revista médica de nivel de impacto Q1.
Trayectoria profesional
Entre 2004-2018 ayudó a avanzar tecnológicamente a los hospitales, Escuelas y lugares de trabajo (en Vela y Salvador arquitectos) creando en Hospitales, y clínicas públicas y privadas nuevas unidades e implantando la más avanzada tecnología para los pacientes; Y creando espacios educativos que colaboren con los nuevos métodos de aprendizaje y favorezcan la salud en el trabajo.
Viendo la necesidad de humanizar estos espacios, creó en 2015 Vela Design que realiza tareas de Investigación y estudio del Diseño Basado en la Evidencia Científica (EBD) para la mejora de la salud y bienestar de las personas (personal, familiares y pacientes, alumnos) mediante la arquitectura.
Ha colaborado como asesora en la redacción del Plan de humanización de la asistencia Sanitaria 2016-2019 de la consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid.
Desde la RSC de Vela Design, forma parte del Consejo asesor de la Fundación Nadine que acompaña a jóvenes artistas que quieren cambiar el mundo. Entendiendo que el arte (como herramienta) aporta nuevas miradas y soluciones innovadoras a problemáticas sociales y medioambientales.
Ha sido además investigadora en el departamento de Biomedicina y docente en diversos Masters, en la Universidad Europea (2013-2021). Y colabora como docente con el GBCe (Green Building Council España).
Es divulgadora de la importancia de una arquitectura saludable y en color, Basada en la Evidencia científica en ponencias en el entidades públicas y privadas, congresos profesionales y universidades.
Junto con Rafael Lledó entre otros compañeros, ha participado en la redacción del Libro “EDIFICIOS Y SALUD, reinventar el hábitat pensando en la salud de las personas” (2021) con el GBCe, el Consejo General de Arquitectura Técnica de España y Clúster Hábitat Eficiente AEÍCE, incidiendo en la importancia de la luz y el Color para la salud en los entornos que habitamos.
Actualmente asesora, realiza proyectos, diseños y estudia el efecto del entorno físico en la salud de las personas siguiendo Diseño Basado en la Evidencia científica, Psicología del color, Neuroarquitectura y Arquitectura para la Salud.
Premios
Ha recibido diversos premios nacionales e internacionales en su labor de investigación y diseño de arquitectura para la salud en hospitales, humanización de la asistencia sanitaria y alivio del dolor infantil.
• Premio Internacional Humanización de la arquitectura y Salud. Mejor proyecto de Investigación Congreso Internacional Humans 2021 “Humanización de la Arquitectura para la salud: ¿Unidades de quimioterapia mejor frías o cálidas?”.
• Premio 2018 al Mejor proyecto de Investigación Beca innovación I+D y Mejor Comunicación Asociación Española de Ingeniería Española (AEIH) “¿Puede una buena arquitectura colaborar en el proceso de enfermedad de las personas? Efecto agudo del entorno en pacientes oncológicos”.
• Premio a la Humanización TEVA 2018 por el Proyecto “Al Cobijo de los árboles, Unidad de Urgencias del Hospital Universitario la Paz de Madrid”.
• Primer Premio 2016 Fundación Gunenthal a la Labor contra el dolor infantil en el Hospital La Paz de Madrid. “Proyecto de la Unidad del Dolor a la Unidad del Color”.
• Primer Premio 2013 Congreso Nacional AEIH por «Nanotectura» . Arquitectura de las emociones» .
Valeria Peredo Figini
Valeria ha desarrollado su carrera profesional en el campo de RRHH. Ha desempeñado diferentes roles como HRBP, experta en formación, gestión del talento, desarrollo de líderes, cultura, bienestar y experiencia empleado en diferentes empresas durante 15 años.
Desde 2017 cuenta con la acreditación de la Federación Internacional de Coaching (ACC) y las certificaciones Coactive Coactive y HR Agile (CPCC – ICP-AHR).
Desde 2018 trabaja como consultora senior en proyectos de comunicación interna, de compromiso empleado, de transformación cultural y liderazgo, coaching ejecutivo y de equipos colaborando con diferentes consultoras de desarrollo de talento. Y es voluntaria en PWNMadrid, facilitando el programa de coaching individual para mujeres ejecutivas y forma parte del equipo académico del Programa de Liderazgo Digital y Humano.
Desde 2022 es People & Culture Lead para The Wellbeing Project. Una ONG dedicada a llevar la cultura del bienestar a todos los agentes de cambio social a través de investigación, programas de desarrollo y generación de comunidades.
Ella cree que para adaptarnos mejor al mundo de cambio constante y rápido en el que vivimos, es importante aprender a mantenernos a nosotros mismos y a nuestro entorno de trabajo psicológicamente seguros. Está enfocada en contribuir con las personas, líderes y equipos a crecer y prosperar en entornos de relaciones saludables y sostenibles.
